Actualmente en Quintana roo, usar autos rentados para cometer crímenes no está tipificado, lo que ha brindado un hueco legal para que los amantes de lo ajeno cometan sus fechorías, es por eso que el diputado Julián Ricalde, propone que este delito se castigue con cárcel, pues en la actualidad, los arrendadores de autos no pueden denunciar al ser víctimas de este delito.
Es por ello que en el Congreso de Quintana Roo se analizará, en la Comisión de Justicia, castigar con cuatro o seis años de prisión a quien use un auto rentado para cometer delitos o “desvíe el uso para el que le fue entregado por el arrendador”.
Esta propuesta fue puesta a discusión por el diputado Julián Ricalde, quien señaló que debe adicionarse el Artículo 142 BIS al Código Penal del Estado Libre y Soberano de Quintana Roo, para sancionar una serie de usos no permitidos con este tipo de vehículos.
Con esta iniciativa se busca bloquear este tipo de delito, pues los amantes de lo ajeno usan los vehículos arrendados para cometer robos, o bien, para desmantelarlos, pues al no encontrarse tipificado, poco pueden hacer los empresarios del rubro para recuperar sus vehículos o no verse involucrados en problemas con la ley por las acciones de un tercero.
Además, el diputado propuso adicionar el Artículo 143 Ter al Código Penal estatal, para que todo aquel que utilice documentación o falsifique su identidad para la renta de un vehículo, tenga una pena de cinco a diez años de prisión.
Pérdidas millonarias
Millonarias pérdidas sufren las arrendadoras por autos que son robados. Como si no fuera suficientemente grave el problema, el delito ni siquiera es reconocido y castigado, comentó en su momento Alma Elena Reynoso Zambrano, vocera de la Asociación de Arrendadores de Vehículos de Quintana Roo, quien aseguró que este sector que genera millones de pesos en ganancias y muchos empleos, sufre el robo de uno de sus autos cada día.
El problema radica en que el delito no es considerado como robo desde un inicio, sino como abuso de confianza. Las pérdidas ascienden a cerca de 130 millones de pesos anuales.
“La Asociación de Arrendadoras me pidió ser vocera porque es un tema totalmente delicado, de seguridad. Desde el principio las arrendadoras sufren de robo y no está tipificado, entonces estos delincuentes rentan un carro para delinquir y el daño que hacen es extremadamente fuerte, porque lo usan para robar, asaltar, para raptar gente, para secuestrarla, subir drogas, armas, y hasta matar. Y no está estipulado como un delito de robo, está como abuso de confianza”, puntualizó.
Explicó que si roban autos, cuando se acude a la Fiscalía no se toma como tal, sino como abuso de confianza. Y por lo mismo estos hurtos, que ocurren prácticamente a diario, ni siquiera se denuncian, porque saben que no les serán devueltos los vehículos ni el dinero. Apenas y se recupera, cuatro de cada 10 autos robados, lamentó.
