Redacción / Quintana Roo Ahora
CDMX.- En una sesión extraordinaria que se llevó a cabo en un gimnasio debido a las protestas que bloquearon el acceso al edificio del Congreso, la Cámara de Diputados de México aprobó el miércoles un controvertido proyecto de ley que podría transformar radicalmente el Poder Judicial del país. Con 359 votos a favor y 135 en contra, los legisladores dieron luz verde a una reforma constitucional que exigiría que todos los jueces se sometan a elecciones populares.
La iniciativa, que fue aprobada siguiendo estrictamente las líneas partidarias, representa la reforma más drástica al sistema judicial en décadas. Sin embargo, aún falta un segundo voto necesario para que la medida avance al Senado, donde se espera que sea ratificada con un margen similar de apoyo.
El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, informó que la minuta de la reforma ya ha sido recibida en la Cámara Alta y se ha turnado a comisiones. La primera lectura del dictamen está programada para el martes 10 de septiembre, con una segunda sesión prevista para el día siguiente, donde se discutirá y, en su caso, aprobará la enmienda constitucional.
Aunque la coalición de Morena, el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde necesita un voto adicional para alcanzar la mayoría calificada requerida, Fernández Noroña se mostró confiado en que lograrán el apoyo necesario. “Estamos sobrados”, afirmó, subrayando que no hay fuerza capaz de detener el proceso legislativo.
Ante la posibilidad de nuevas manifestaciones, el presidente del Senado indicó que ya se están considerando sedes alternas, como el Centro Bancomer, el Centro Banamex o la antigua sede del Senado en la calle Xicoténcatl. Además, advirtió que podría recurrir a la fuerza pública para garantizar la seguridad durante la discusión de la reforma judicial.
La medida ha generado una intensa controversia, con sectores del Poder Judicial y estudiantes de Derecho oponiéndose vehementemente a lo que consideran un ataque a la independencia judicial. A pesar de las protestas, el liderazgo del Senado ha dejado claro su compromiso de avanzar con la reforma, que podría redefinir el proceso de selección de jueces en México.
