
Redacción / Quintana Roo Ahora
Campeche.- La vida del niño Joel, cariñosamente conocido como “El Choco”, dio un giro inesperado tras pasar seis días desaparecido en la selva de Campeche. Aunque su rescate fue motivo de alivio, las circunstancias que rodean su desaparición han desencadenado una investigación por posible maltrato infantil, dejando en el aire más preguntas que respuestas.
El pasado 5 de octubre, Joel desapareció en el Rancho Río Blanco II, en el municipio de Palizada, lo que llevó a las autoridades a activar una Alerta Amber para su localización. Su última aparición fue reportada por vecinos, quienes lo vieron jugando con sus perros. Su rescate no solo reveló la resiliencia del niño, quien se mantuvo hidratado con agua de charcos y se entretenía mirando las estrellas, sino que también destapó una posible realidad más oscura: según testigos, “El Choco” podría haber huido de un hogar donde supuestamente sufría maltrato.
Una vez encontrado el 11 de octubre, Joel fue trasladado de urgencia a un hospital en Emiliano Zapata, Tabasco, donde los médicos diagnosticaron deshidratación y desnutrición. Este estado de salud llevó a las autoridades a solicitar su resguardo, trasladándolo a un albergue donde recibirá atención psicosocial, física y emocional.


Mientras la comunidad celebra su rescate, el futuro de Joel pende de un hilo, a la espera de una investigación que examine la situación en su hogar. La gobernadora de Campeche, Layda Sansores, expresó su alivio al informar que el niño había sido encontrado sano y salvo, pero la verdad detrás de su desaparición continúa siendo un enigma. Las preguntas son muchas: ¿Qué llevó a un niño de 9 años a huir de su hogar? ¿Qué sucedió realmente en los días previos a su desaparición? El caso de “El Choco” es un recordatorio de que detrás de cada historia de rescate puede haber un trasfondo doloroso que necesita ser abordado con urgencia.