
Redacción / Quintana Roo Ahora
MÉXICO.- La inflación en México continúa enfriándose, pero no lo suficiente como para calmar las expectativas de los analistas. De acuerdo con los datos del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) publicados por el INEGI este 23 de diciembre, el nivel inflacionario se ubicó en 4.44 por ciento anual durante la primera quincena de diciembre, marcando así su tercera quincena consecutiva de desaceleración desde el 4.55 por ciento registrado en la segunda mitad de noviembre.
Aunque esta cifra refleja un avance en el control de los precios, se mantiene por encima del 4.33 por ciento que preveía el consenso de mercado según la más reciente encuesta de expectativas de Citi.
En términos quincenales, la inflación aumentó 0.42 por ciento respecto a la quincena anterior. Este incremento fue menor a las expectativas de los analistas, quienes proyectaban un alza de 0.47 por ciento, destacando un leve alivio en los precios al consumidor al cierre del año.
¿Por qué desacelera la inflación?
El principal motor detrás de este enfriamiento sigue siendo la inflación subyacente, que se moderó a 3.62 por ciento anual en la primera quincena de diciembre, una leve baja desde el 3.59 por ciento registrado en la segunda quincena de noviembre.
Dentro de este componente, las mercancías reportaron un aumento anual de 2.44 por ciento, un dato que confirma la tendencia a la baja desde el 2.32 por ciento observado a finales del mes pasado. Por su parte, los servicios se desaceleraron hasta alcanzar un nivel de 4.88 por ciento, después de haberse ubicado en 4.98 por ciento en noviembre.
Productos agropecuarios y energéticos
La inflación no subyacente también mostró señales de ralentización. Los productos agropecuarios, que en las tres quincenas previas habían presentado incrementos de doble dígito, cerraron esta quincena con una tasa anual de 8.68 por ciento. Asimismo, los energéticos y las tarifas autorizadas por el gobierno registraron un aumento de 5.11 por ciento, una ligera desaceleración respecto al 4.93 por ciento de la segunda quincena de noviembre.
Perspectiva hacia el 2025
El cierre del 2024 refleja avances en el combate a la inflación, pero los expertos advierten que los retos persisten. El dato inflacionario, aunque a la baja, sigue superando las proyecciones de mercado, lo que podría influir en las decisiones de política económica y monetaria a inicios del próximo año. Con una inflación subyacente aún firme y presiones externas por el panorama global, el camino hacia la estabilidad total podría ser más largo de lo esperado.
Para los hogares mexicanos, esto implica una temporada decembrina con ligeras mejoras en el poder adquisitivo, aunque las secuelas de la inflación aún pesan en los bolsillos. ¿Será el 2025 el año donde la economía finalmente respire con tranquilidad? Las cifras por venir nos lo dirán.