mayo 24, 2025

Redacción / Quintana Roo Ahora

Cancún, la ciudad que nunca deja de sorprendernos (para mal), vuelve a ser noticia. Si no era suficiente con el ya conocido y descarado “Sindicato de Taxistas, S.A. de C.U.O.T.A.S.”, ahora le toca turno a otro clásico de la corrupción local: la Dirección de Tránsito. Porque claro, ¿qué es Cancún sin un escándalo semanal para recordarnos en dónde vivimos?

El “secreto” peor guardado

La Dirección de Tránsito ha sido conocida desde tiempos inmemoriales como la “caja chica”, pero lo que debería llamarse así es la paciencia ciudadana, porque esa sí está más vacía que nunca. Según las últimas denuncias, parece que motociclistas y patrulleros no solo llevan multas en sus bolsillos, sino también sobres para sus jefes. ¿Cuánto cuesta un día de trabajo honesto en Cancún? Al parecer, entre 2 mil y 3 mil 500 pesos diarios, según los testimonios. Eso sí, siempre en efectivo, no vaya a ser que dejen huella.

Narcomantas: el boletín oficial de los problemas

Y si creíamos que la cosa no podía ser más surrealista, entra en escena una narcomanta. Esta vez, en la Supermanzana 518, donde amanecimos con amenazas al mismísimo David Alejandro Cruztitla Quiroz, coordinador general de Tránsito y, según los testimonios, el “CEO” del negocio de las cuotas. Nada como las mañanas de Cancún, con café en mano y la última edición de amenazas escritas a la vista de todos.

¿Operativos o circo itinerante?

Los “operativos de revisión de motocicletas” liderados por Cruztitla Quiroz son ya una tradición, pero no precisamente por su efectividad. ¿Será que los operativos son un simple pretexto para alimentar el sistema de cuotas? No lo sabemos, pero si alguien encuentra motocicletas en regla después de estos espectáculos, ¡que pase el tip!

La gran pregunta: ¿Cómo limpiamos este nido?

Erradicar la corrupción en Cancún es como intentar vaciar el océano con un colador. Pero, oye, todo empieza con pequeños pasos:

1. Auditorías externas y sin compadres de por medio.

2. Llamar al enjambre verdadero: Ciudadanos organizados que exijan transparencia.

3. Menos operativos de motocicletas y más operativos contra mandos corruptos.

Mientras tanto, seguimos esperando el verdadero «Operativo Enjambre», no para multar motos, sino para desmantelar este sistema de cuotas que ya nos tiene hartos. Porque Cancún no merece solo ser conocido por sus playas, sino por ciudadanos que dicen ¡basta!.

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