Puerto Morelos amanece con otra historia de terror. Dos taxistas desaparecidos y un video escalofriante que deja en evidencia lo que todos sospechábamos, pero pocos se atreven a decir: el crimen organizado ha infiltrado hasta las estructuras más básicas del municipio.
En el video, un hombre con voz temblorosa, rostro agachado y uniforme del sindicato de taxistas confiesa lo impensable: que una regidora, una servidora pública electa por el pueblo, está obligando a los trabajadores del volante a cobrar “derecho de piso” a sus propios compañeros. Y no es una simple amenaza. Si no cumplen, les espera la muerte. Así de claro, así de brutal.
El taxista se identifica como Jorge Manuel y señala directamente a Yazmin Vivas Medina, regidora de Morena y secretaria del sindicato de taxistas de Puerto Morelos. Según sus palabras, ella no solo impone estas cuotas criminales, sino que utiliza nombres que resuenan en los rincones más oscuros del crimen organizado: Doña Lety, el Muchachito, el Turco. Nombres que significan muerte, desapariciones, familias destrozadas.
¿Cuántos más están sometidos a este terror? ¿Cuántos taxistas han sido silenciados con violencia por no acatar órdenes de criminales con credenciales de funcionarios? ¿Hasta cuándo Puerto Morelos seguirá siendo rehén de una mafia que se esconde detrás de partidos políticos y cargos públicos?
Mientras la autoridad estatal y federal calla, los ciudadanos seguimos sumando desaparecidos. Y hoy, la pregunta es inevitable: ¿Dónde están los taxistas desaparecidos? ¿Quién los tiene? ¿Quién se beneficia de su silencio?
Si esto no es un grito de auxilio para Puerto Morelos, ¿qué lo es?
