Redacción/Quintana Roo Ahora
COZUMEL. — El periodista de Cozumel Melvin García, fue localizado sin vida al interior de una vivienda en la colonia Adolfo López Mateos de la isla. Se trata del autor del libro Mayra, una historia que documenta el asesinato de la estudiante del Colanep, donde diversos sectores de la sociedad cozumeleña relacionaron con este crimen, al exgobernador de Quintana Roo, Félix González Canto.
De acuerdo con los primeros informes, vecinos de la zona reportaron a 911 olores extraños que emanaban del interior de unos cuartos en renta, ubicados en la planta alta de una vivienda situada sobre la avenida 45 Sur, entre la calle 3 Sur y Adolfo Rosado Salas.
Al ingresar al sitio las autoridades localizaron sin vida al periodista Melvin García, de 57 años de edad, su cuerpo presentaba signos de ahorcamiento.
Melvin recordado por su valentía al publicar el libro que documenta la historia de Mayra, la joven de 16 años asesinada en noviembre de 1999, que nunca obtuvo justicia, la cual se convirtió en un asunto político- mediático que arrastró a personas inocentes como Nelson Alejandro Ciau Polanco, acusado de ser el responsable de su muerte, por escribir una carta, y quién tras un periodo en prisión tuvo que ser liberado, debido a que la entonces Procuraduría no pudo demostrar su culpabilidad.
En noviembre de 2016, Melvin público una amplia investigación en su libro con testimonios de las personas involucradas en el caso, así como las múltiples irregularidades, y negligencias de las autoridades que dieron impunidad a los responsables. Algunos de los testimonios, señalaban que el caso estaba relacionado al ex gobernador, Félix González Canto por dos razones:
Porque, “su camioneta una “Suburban” gris, que era del Presidente Municipal de la isla de Cozumel (entonces Félix Gonazalez Canto) manejada por su chofer, Agustín Rangel, pasaba a buscar a Mayra a unas cuadras del colegio”, según el testimonio de Nelson Alejandro, plasmado en la obra.
En otro testimonio menciona que, “Siempre ha existido gente que pensó o piensa que él tuvo algo que ver, ya sea protegiendo a la gente que cometió esto o inclusive haber estado personalmente implicado”.
En un apartado de entrevistas, uno de los personajes menciona que quizás el tema fue utilizado para guerras políticas y Melvin enlista una serie de acontecimientos oscuros, que dejaron múltiples cuestionamientos sin respuesta:
“Aquí algunas ‘preguntas’ inexplicables a partir de los hechos ocurridos durante las primeras 24 horas del Caso Mayra:
1).- Quién le ordena a la Policía Municipal ‘chamaquear’ a los medios para concentrarlos en un decomiso de armas ficticio, con la intención de que ninguno esté presente en el momento del levantamiento del cadáver de Mayra.
2).- Quién le ordena al médico legista decretar que la joven murió por asfixia, algo que resultó falso, pues Mayra falleció por un golpe mortal en la cabeza.
3).- Quién ordena ‘montar’ la escena del crimen, pues Mayra es encontrada con el cordón de su mochila alrededor del cuello, dando ‘línea’ al Dr. Efrén González para que pueda encajar con su ‘autopsia’, que la joven falleció por asfixia.
4).- Quién ordena desmontar el terreno al día siguiente de que se encontró el cadáver y construir una mansión en tiempo récord.
5).- Quién tuvo tanto poder para mover todas las piezas en una claro intento de proteger al o a los asesinos, e intentar engañar a la comunidad cozumeleña”, entre muchos más textos.
Melvin se fue, pero su obra queda, como cuando “la vida de Mayra terminó, pero comenzó su historia”.
