Redacción / Quintana Roo Ahora
CANCÚN.- Una bebé de apenas cuatro meses lucha por su salud en el Hospital General “Dr. Jesús Kumate Rodríguez”, donde permanece en estado delicado y enfrenta el riesgo de perder la mano derecha, en lo que sus padres señalan como un caso de presunta negligencia médica.
De acuerdo con el testimonio de la familia, la menor fue ingresada el pasado 20 de agosto con síntomas de diarrea, vómitos y fiebre, diagnosticados inicialmente como deshidratación. Aunque el cuadro no parecía de gravedad, los médicos decidieron internarla y someterla a procedimientos que los padres califican como excesivos e injustificados.
Entre las intervenciones aplicadas, denunciaron que la pequeña fue sedada en un nivel que describen “similar al de un paciente en estado vegetativo”, además de que se le colocó un tubo traqueal y una sonda nasal. Una semana después, el 27 de agosto, ambos dispositivos fueron retirados y la bebé recuperó la conciencia.
No obstante, la familia acusa que durante la hospitalización la niña sufrió múltiples lesiones, como hematomas, quemaduras de tercer grado y laceraciones en brazos y pies ocasionadas, presuntamente, por repetidos intentos fallidos de canalización.
La situación se complicó cuando médicos del hospital emitieron un dictamen en el que sugieren amputar la mano derecha de la menor, debido al daño severo que presenta. Ante este panorama, los familiares exigieron la intervención inmediata de autoridades estatales y federales, así como una investigación que deslinde responsabilidades.
Los padres aseguraron contar con evidencia fotográfica de las lesiones, misma que presentarán en su denuncia ante las instancias correspondientes. Hasta el momento, el Hospital General “Dr. Jesús Kumate Rodríguez” no ha emitido postura oficial sobre el caso, mientras la familia mantiene firme su demanda de justicia y atención médica adecuada para la bebé.
