Redacción / Quintana Roo Ahora
CDMX.- Santiago Giménez no está viviendo sus mejores días. El delantero mexicano, que hasta hace poco era visto como la gran promesa del futbol nacional, atraviesa una preocupante sequía goleadora que ha puesto en duda su momento y su futuro inmediato.
El «Bebote» lleva ocho partidos sin poder marcar, una sequía que abarca tanto sus compromisos con el Milan como con la Selección Mexicana. Con la camiseta rossonera, Giménez acumula seis encuentros sin festejar un gol, incluyendo un penalti fallado ante el Napoli, un error que no pasó desapercibido para la exigente afición italiana. Con el Tricolor, tampoco logró romper su mala racha durante el Final Four de la Concacaf, a pesar de ser titular en ambos partidos.
Su última anotación se remonta al 18 de febrero, cuando marcó contra su exequipo, el Feyenoord, en los Playoffs de la UEFA Champions League. Un gol con tintes de revancha, pero que de poco sirvió, ya que el Milan quedó eliminado de la competencia más prestigiosa de clubes en Europa. Desde entonces, Giménez ha pasado desapercibido en el campo, generando dudas sobre su capacidad para sostener el nivel que lo llevó a la Serie A.
Recientemente, el canterano de Cruz Azul habló con Christian Martinoli y Luis García para TV Azteca Deportes y sorprendió al revelar un mensaje de Javier Aguirre en sus primeras convocatorias con la Selección Mexicana. «Nos decía que le valía madres jugar bonito, que lo que él quería era que las selecciones volvieran a respetar a México», confesó el delantero.
Las palabras del «Vasco» evidencian un cambio de mentalidad dentro del equipo nacional, aunque el debate sigue abierto: ¿asta filosofía es suficiente para competir en la élite? Giménez también destacó el impacto de Aguirre y Rafa Márquez en el grupo, asegurando que han ayudado a que los jugadores «recuerden su ADN» y defiendan la camiseta con orgullo.
El problema es que el futbol, además de garra, exige resultados. Y Santiago Giménez, hasta ahora, no los ha dado. La pregunta sigue en el aire: ¿su crisis es solo un bache pasajero o el inicio de una caída que podría costarle su lugar como referente del futbol mexicano? El tiempo y los goles (o la falta de ellos) darán la respuesta.
