Redacción / Quintana Roo Ahora
Cancún.- Al menos 15 reclusos permanecen aislados en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de la ciudad ante un posible brote de tuberculosis, sin acceso a medicamentos ni atención médica, denunciaron sus familiares, quienes aseguran no haberlos visto en más de 30 días.
De acuerdo con los testimonios, los internos están siendo mantenidos en condiciones insalubres, incomunicados, y sin un diagnóstico médico oficial. Las autoridades penitenciarias no han emitido declaración alguna, mientras que la Secretaría de Salud estatal confirmó que durante la última semana se han registrado seis nuevos casos de tuberculosis en Quintana Roo, acumulando un total de 179 casos en hombres y 72 en mujeres durante 2025.
“Tengo a mi hijo preso desde hace dos años y ni siquiera ha sido sentenciado. Lleva casi un mes encerrado en una celda con otros 15 internos enfermos. Nos enteramos de su aislamiento cuando vinimos a visitarlo y nos negaron la entrada”, relató Teresa, madre de uno de los internos.
Otro caso es el de Romana, cuyo esposo también fue recluido en la llamada “área de los tuberculosos”. “Me dijo que está cada vez peor. No puede ni hablar, pero el personal se niega a llevarlo con el médico. Trajimos medicamento básico y no nos dejaron ingresarlo”, denunció con impotencia.
La comunicación con los reclusos ha sido reducida a breves llamadas telefónicas, en las que, según los familiares, los internos expresan su desesperación ante la falta de atención médica y condiciones mínimas de cuidado.
Mientras tanto, el silencio de las autoridades penitenciarias aumenta la preocupación de los familiares y deja sin respuesta la pregunta más urgente: ¿quién responde por la salud de los olvidados tras las rejas?
