Redacción / Quintana Roo Ahora
Ciudad de México.– Dos días después de su detención, Uriel Rivera Martínez, el hombre acusado de acosar sexualmente a la presidenta Claudia Sheinbaum, fue trasladado al Reclusorio Norte, donde continuará el proceso penal en su contra por diversas denuncias de agresión y acoso sexual.
Elementos de la Policía de Investigación de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) realizaron el traslado del imputado, de 33 años, hacia las instalaciones del reclusorio ubicado en Tlalnepantla, Estado de México, donde se llevará a cabo su audiencia inicial para determinar su situación jurídica.
Aunque todavía no ha sido vinculado a proceso, las autoridades indicaron que en las próximas horas podrían darse a conocer más detalles sobre las acusaciones en su contra y el tiempo que permanecerá bajo resguardo mientras avanza la investigación.
Rivera Martínez enfrenta al menos tres denuncias por acoso y agresión sexual, todas cometidas en el Centro Histórico de la Ciudad de México. La más reciente, y la que detonó su detención, fue en agravio de la presidenta Claudia Sheinbaum, a quien presuntamente tocó el pecho y besó sin consentimiento mientras ella saludaba a simpatizantes durante un recorrido.
Sheinbaum declaró que en el momento no se percató plenamente de la agresión, pero presentó la denuncia formal para evitar la impunidad y visibilizar la violencia que enfrentan las mujeres. “Lo denuncié porque ninguna mujer debe tolerar una agresión así, venga de quien venga”, señaló.
Además, se documentaron otros dos casos: el de una joven de 25 años que relató haber sido tocada sin consentimiento, y el de otra mujer que denunció haber sido acosada por el mismo individuo entre las calles Bolívar y Tacuba. Ambos incidentes quedaron asentados en un informe de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
La detención de Rivera Martínez ocurrió en la calle Paseo Condesa, en la alcaldía Cuauhtémoc, tras labores de localización derivadas de las denuncias presentadas.
El acoso sexual está tipificado en el Código Penal de la Ciudad de México y puede castigarse con penas de hasta tres años de prisión, además de sanciones administrativas y antecedentes penales.
Con este caso, las autoridades capitalinas reafirman su compromiso de actuar con firmeza ante los delitos de violencia sexual y reiteran el llamado a las mujeres víctimas de cualquier forma de acoso a denunciar y buscar apoyo institucional.
