El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció durante la conferencia matutina en Acapulco que se implementará un «plan único» de seguridad en Guerrero, especialmente en Acapulco y Coyuca de Benítez, tras el paso del huracán Otis hace casi dos meses.
López Obrador destacó que la situación post huracán brinda una oportunidad para mejorar las condiciones de seguridad en la región. En este sentido, reveló que se construirán y pondrán en funcionamiento cuarteles en diferentes puntos de Acapulco y Coyuca de Benítez, con la presencia de 10 mil elementos de la Guardia Nacional.
Comparando con la actual fuerza policial en el estado, que consta de 7 mil 22 elementos entre municipales, estatales y navales, resaltó que solo la Guardia Nacional cuenta con 14 mil 55 elementos en Guerrero, de los cuales 10 mil estarán de forma permanente en Acapulco.
El presidente enfatizó que este despliegue reforzado de seguridad contribuirá significativamente a fomentar el turismo en Acapulco, tanto de visitantes extranjeros como nacionales, al tiempo que garantizará la protección de los habitantes locales.
Ante la afectación significativa causada por el huracán, López Obrador subrayó la necesidad de implementar enfoques nuevos y mejorados, adaptándose a las circunstancias cambiantes. En este contexto, reiteró su compromiso de proporcionar seguridad robusta en la región, aprovechando la coyuntura para implementar medidas más efectivas y eficientes.