En un sombrío descubrimiento en pleno día de Navidad, las autoridades francesas se enfrentaron a una escalofriante escena: una madre y sus cuatro hijos, todos menores de 11 años, encontrados sin vida en su hogar al este de París. El padre, ahora bajo arresto, es señalado como el principal sospechoso de este acto atroz.
Vecinos de la familia, al percatarse de un considerable charco de sangre frente a la puerta de la residencia el 25 de diciembre, alertaron a la policía parisina. El fiscal Jean-Baptiste Bladier informó que, durante el operativo, descubrieron a dos niñas de 7 y 10 años junto a su madre, aparentemente apuñaladas repetidamente en la noche del 24 al 25 de diciembre. Además, los otros dos hijos, de 4 años y 9 meses, fueron víctimas de asfixia o ahogamiento.
Bladier describió la escena como un «caos impresionante», con manchas de sangre en toda la residencia. Este martes, el edificio fue adornado con ramos de flores, decoraciones navideñas y un peluche en memoria de las víctimas.
El principal sospechoso, el padre de los niños, de 33 años, fue arrestado fuera de la residencia de su padre al noreste de París. Este individuo ya tenía antecedentes, ya que en 2019 apuñaló a su pareja, embarazada en ese momento del hijo mayor, aunque la investigación fue abandonada debido a problemas de salud mental del agresor.
El alcalde de Meaux, Jean-Francois Cope, calificó la tragedia como un «horror absoluto». El presunto autor ya había sido ingresado en 2017 en un hospital psiquiátrico después de un intento de suicidio. La comunidad local se enfrenta a la conmoción y el dolor mientras las autoridades continúan investigando este desgarrador suceso.