Trabajadores han dado inicio a la demolición del antiguo cine “Blanquita”, ubicado al lado del parque de “Las Palapas” en el municipio de Benito Juárez, tras más de 20 años de abandono. Según fuentes consultadas, se pretende derrumbar este emblemático sitio para dar paso a la construcción de un nuevo cine, también perteneciente a la empresa Cinépolis, el cual contará con un espacio de estacionamiento.
Los visitantes del parque de «Las Palapas», el cual también se encuentra en proceso de remodelación, podrán hacer uso del nuevo estacionamiento una vez esté terminado, mientras continúan las labores para edificar el moderno cine. Al adentrarse en el inmueble, que durante casi 40 años fue uno de los principales centros de entretenimiento de Cancún, los trabajadores se encontraron con un espacio deteriorado, lleno de grafitis, basura y en estado de abandono.
Imágenes y videos compartidos en redes sociales muestran ventanas rotas, techos caídos y suelos desgastados en lo que antes fueron salas de cine y puntos de encuentro para la comunidad. Se estima que la demolición de la antigua estructura y la construcción del estacionamiento nuevo tomarán alrededor de un mes, aunque aún no hay una fecha definida para el inicio y finalización de la construcción del nuevo cine.
El cine “Blanquita” abrió sus puertas hace casi cuatro décadas, convirtiéndose en un lugar emblemático y de reunión para los habitantes de Cancún, junto con el parque de “Las Palapas”. No obstante, con el crecimiento urbanístico y la aparición de plazas comerciales y centros de entretenimiento en la ciudad, el cine dejó de operar, cayendo en el olvido por más de dos décadas.
Hace aproximadamente un año, el gobierno municipal de Benito Juárez, a través de Distrito Cancún, intentó rehabilitar este espacio en un esfuerzo por revitalizar el centro de la ciudad en términos económicos, sociales y culturales. Sin embargo, dicha intervención se limitó a la remodelación de la fachada. Esta segunda iniciativa busca revivir el cine “Blanquita” para que se convierta en un ícono cultural para los habitantes de Cancún.
Por su parte, Tiziana Roma, una cronista independiente de Cancún, ha manifestado su apoyo a la recuperación de este espacio, señalando que ha permanecido abandonado durante demasiado tiempo.