Redacción / Quintana Roo Ahora
Quintana Roo .- Ante los efectos del huracán ‘Beryl’, que afectará territorio quintanarroense como categoría 2, la gobernadora Mara Lezama anunció la suspensión de clases en todos los niveles educativos, así como servicios de guarderías y actividades en el poder judicial a partir del jueves. Además, entrará en vigor la ley seca desde los primeros minutos del jueves, por tiempo indefinido.
Las empresas navieras mantendrán actividades el miércoles y suspenderán de manera paulatina todo cruce marítimo los días jueves y viernes a las islas, reanudando hasta que las condiciones climatológicas lo permitan. Durante una reunión de evaluación y seguimiento sobre el avance y trayectoria del huracán ‘Beryl’, Mara Lezama escuchó de los 11 presidentes municipales las acciones implementadas para mitigar los posibles impactos, como la limpieza de pozos de absorción y drenaje, el podado de árboles, y la habilitación de edificios como refugios para los habitantes y turistas que lo requieran.
La presidenta municipal de Felipe Carrillo Puerto, María Candelaria Hernández, confirmó que los habitantes de las comunidades de Punta Herrero y María Elena ya fueron evacuados, aunque no precisó el número. El presidente municipal de Lázaro Cárdenas, Emir Bellos, informó que están listos para la evacuación en Holbox y Chiquilá.
Sin embargo, los presidentes municipales de Bacalar, Alfredo Contreras Méndez; de José María Morelos, Erick Borges Yam; y de Lázaro Cárdenas, reportaron que enfrentan la contingencia con poblaciones incomunicadas debido a cruces de agua sobre las carreteras, falta de energía eléctrica y la molestia de mosquitos. Otros presidentes municipales indicaron la escasez de equipo propio para atender la contingencia, recurriendo a las Secretarías de la Defensa Nacional y de la Marina para obtener equipo y personal de apoyo.
Según la reunión de evaluación, a unas 48 horas del impacto del huracán ‘Beryl’, al menos 22 comunidades de varios municipios se encuentran en un estado de vulnerabilidad por las carreteras inundadas y cruces de agua que dificultan o imposibilitan el tránsito vehicular.