Redacción / Quintana Roo Ahora
No se rían (bueno, tantito sí), porque esto nos pudo haber pasado a cualquiera. La protagonista de esta historia es una joven que, emocionada por el concierto de Don Omar en Mérida en 2025, pensó que había encontrado la ganga de su vida: boletos de «apenas mil pesos». Spoiler: eran mil dólares.
“Yo dije, no manches, están súper baratos, y pensé: pues claro, es Mérida, la renta del lugar ha de ser una ganga”, confesó la chica, con la misma inocencia de quien todavía no ha sido golpeado por la cruel realidad de los números. ¡23 mil varos! le costó el chistecito.
El video ya es viral, y ¿cómo no? La joven cuenta con la desesperación de quien descubre la «gracia» demasiado tarde: “Voy a tener que llamar al banco y pedir que me lo difieran a meses sin intereses. No ma…, pagué 23 mil baros, y dije: ‘¡ahuevo!, el boleto más caro!’, pero ¡no!, pinch# Don Omar, espero que al menos me dé un beso”.
Y ahí está el meollo del asunto: ¿vale la pena un boleto VIP que cuesta como una quincena (o dos, o tres)? Bueno, Don Omar lo vale, pero esperamos que el hombre no solo cante Dale, Don Dale, sino que baje del escenario y le dé las gracias personalmente. Porque por 23 mil pesos, mínimo esperas que te avienten una rosa, te dediquen una canción y hasta te inviten al after.
La moraleja de la historia es clara: siempre, siempre revisen si el precio está en pesos o en dólares. Porque si no, una noche de «flow» y reguetón se puede convertir en seis meses de pagos sin intereses y sopas Maruchan.
Por lo pronto, Don Omar, ya le debes un beso a esta joven y a medio Internet que está gozando esta anécdota.