Agencias
PLAYA DEL CARMEN.— El proyecto que devastó más de tres hectáreas de selva en el complejo habitacional “súper exclusivo”, Playacar, no tenía permisos para destruir el hábitat de los venados y otras especies. Además, debía reubicarlos en espacios seguros, antes de iniciar el desmonte, reconoció la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) al imponer una clausura total “temporal” al proyecto.
En un comunicado, dijo que en atención a denuncias populares sobre el avistamiento de venados en Playacar Fase 2, en el municipio de Playa del Carmen, Quintana Roo, la Profepa realizó una visita de inspección y detectó un predio con cambio de uso de suelo en terrenos forestales sin autorización sobre impacto ambiental, por lo que se procedió a la clausura.
Los días 26 y 29 de mayo, inspectores de la Profepa realizaron visitas técnicas y de inspección en materia forestal por cambio de uso de suelo al predio ubicado dentro del Condominio Playacar, donde se detectó la remoción de vegetación secundaria arbustiva de selva mediana subperennifolia.
Además, no se acreditó la autorización de cambio de uso de suelo en terrenos forestales emitida por la Semarnat, por lo que se impuso la medida de seguridad consistente en la clausura total temporal.
La Profepa seguirá con el procedimiento administrativo que se instaure.
Acerca de los venados cola blanca, Odocoileus virginianus, que han sido detectados en la misma zona, es importante señalar que la empresa desarrolladora de este conjunto habitacional privado debe realizar el rescate y reubicación de fauna. El rescate de fauna es una de las condicionantes establecidas en sus resolutivos de impacto ambiental y/o cambio de uso de suelo en terrenos forestales y para cumplirla debe gestionar las autorizaciones necesarias -incluida una posible reubicación de fauna- ante la Dirección General de Vida Silvestre de la Semarnat.
La Profepa sostuvo que verificará que la empresa asuma efectivamente el rescate de los ejemplares de venado cola blanca y que cuente con todas las autorizaciones que marca la ley.