TULUM, Quintana Roo, 2 de mayo. — Tras la cacería de prestadores de servicios turísticos, centros de hospedaje y restaurantes del norte de Quintana Roo, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) se quedó sin delegado en la entidad. Israel Francisco Malacón Osuna, anunció que dejará su cargo con “emotiva” despedida en Instagram.
A menos de 24 horas de que se ventilarán inspecciones de cacería a establecimientos comerciales de Cancún particularmente, restaurantes para presionar a empresarios con multas de hasta 140 mil pesos, Malacón anunció que dejará el cargo en la entidad, no sin antes presumir en Instagram los logros de su función. Sin precisar razones, agradeció “profundamente” a la Gobernadora, Mara Lezama y a su equipo de trabajo, por considerarlo “uno más de ellos”.
“Fue un alto honor acompañarla y servir a Quintana Roo de su lado. También extiendo mi gratitud al señor Paul Carillo, a los Gobiernos Municipales, particularmente a la Presidenta Municipal de Benito Juárez, Ana Paty Peralta De la Peña y las autoridades de los aeropuertos de Cancún y Tulum”, dijo.
Aseguró que fue un “honor” servir al país bajo el liderazgo del ex presidente Andrés Manuel López Obrado y la Doctora Claudia Sheinbaum, “lo hice siempre con profundo amor, entrega, compromiso y creatividad”.
El ex delegado destacó sus actividades como logros de recaudación en los destinos turísticos del estado. Pero, sin mencionar el sur, Chetumal, Felipe Carrillo Puerto, Bacalar y José María Morelos, donde el consumidor se encuentra a la bendición de “Dios” ante los burdos abusos de malos comercios.
En Bacalar, por ejemplo, los restaurantes pueden incluso pueden cobrar propinas “obligatorias”, sin que los consumidores pueden presentar quejas y denuncias en una oficina de representación. Todo se reduce a la grabadora del 01 800 468 87 22 o al 55 5568 8722 y la página web de la Profeco.
Ni que decir de José María Morelos, o Felipe Carrillo Puerto donde cualquier víctima de abuso, tendría que cruzar la zona maya para llegar al “modulo” del Aeropuerto Internacional de Tulum “Felipe Carrillo Puerto”, con suerte ahí encuentra atención.
Muy emotiva “despedida”, poco faltó para que le cantarán las golondrinas al super delegado. Pero, sus logros se reducen a la operatividad de Cancún, donde con inspecciones al menú, la Profeco exige a los restauranteros “prosperidad compartida”.