Hoteleros del sur de Quintana Roo piden “piso parejo” ante auge de plataformas de renta vacacional

Redacción / Quintana Roo Ahora

BACALAR.- Las plataformas digitales de renta vacacional como Airbnb no solo cambiaron las reglas del juego en la industria turística: llegaron para quedarse. Así lo reconoció Raúl Andrade Angulo, presidente de la Asociación de Hoteles y Servicios Turísticos de la zona sur de Quintana Roo, quien hizo un llamado urgente a las autoridades para establecer esquemas de regulación que garanticen condiciones equitativas para todos los prestadores de servicios de hospedaje.

Durante una entrevista, el líder hotelero explicó que erradicar el hospedaje digital sería una misión imposible, ya que las preferencias de los turistas, tanto nacionales como internacionales, han migrado hacia estas aplicaciones. “Hoy en día, todo el mundo busca hospedaje desde su celular. Es una tendencia global que no podemos detener, pero sí podemos regular”, afirmó.

Tan solo en los municipios de Othón P. Blanco y Bacalar, operan al menos dos mil unidades de hospedaje bajo este esquema, muchas de las cuales, aseguró Andrade Angulo, lo hacen sin cumplir con los requisitos fiscales, de protección civil o normativos que se exigen a los hoteles establecidos. “Es una competencia desleal. Los hoteleros pagan impuestos, licencias, cumplen regulaciones… y estos otros espacios no”, denunció.

La preocupación es mayor en destinos en auge como Bacalar, donde se estima que existen mil 300 unidades en renta a través de plataformas digitales. En Mahahual operan unas 400 y en Chetumal menos de 100, aunque el número real podría ser más alto, ya que no existe un registro oficial. Esta falta de inventario también complica el desarrollo de estrategias para un turismo más ordenado y sostenible.

Aunque el Gobierno del Estado ha comenzado procesos de regulación, Andrade señaló que no todos los anfitriones están dispuestos a ser controlados, lo que pone en desventaja al sector hotelero formal. “No se trata de prohibir, sino de equilibrar el terreno. Todos deben aportar y operar bajo las mismas reglas”, insistió.

La discusión se da en un momento clave para el sur del estado, que vive una nueva etapa turística impulsada por proyectos como el Tren Maya y la promoción del turismo sostenible. Para el sector hotelero, el crecimiento del número de visitantes debe ir acompañado de una política clara que regule la oferta de hospedaje, sin frenar la innovación, pero sí garantizando justicia y legalidad.