Redacción / Quintana Roo Ahora
CANCÚN.- En un tiempo donde la opinión pública necesita más luces que ruidos, nos llena de entusiasmo anunciar que Julián Ricalde Magaña se integra como columnista a Quintana Roo Ahora. Su llegada no sólo representa un nuevo espacio de reflexión crítica, sino también el regreso de una voz con profunda experiencia en los asuntos públicos del estado.
Ricalde Magaña ha sido diputado local por Quintana Roo, secretario de Desarrollo Social estatal, y también fungió como presidente municipal de Benito Juárez, uno de los municipios más importantes del estado y del país. En cada una de esas responsabilidades ha dejado huella por su estilo directo, su vocación por el servicio público y, sobre todo, por su constante preocupación por el bienestar colectivo.
A lo largo de su carrera, ha destacado por su profesionalismo, honestidad y compromiso ético, valores que escasean en la escena política actual. Su pensamiento crítico y su capacidad de análisis lo han convertido en un referente obligado cuando se trata de entender los retos que enfrenta Quintana Roo: desde la inseguridad hasta el crecimiento urbano desmedido, la desigualdad social y los desafíos del turismo en una economía cada vez más frágil.
A partir de ahora, su columna —que se publicará semanalmente— será un espacio donde converjan análisis, contexto histórico y mirada de futuro. No se trata sólo de opinar, sino de provocar reflexión, tender puentes y cuestionar lo establecido, siempre con el rigor y la libertad que caracterizan a esta casa editorial.
Escribir es un acto de responsabilidad, y estamos seguros que no viene a pontificar, sino a dialogar con las y los ciudadanos que quieren ver a Quintana Roo avanzar sin maquillar sus problemas.
Desde Quintana Roo Ahora, celebramos esta incorporación como parte de nuestro compromiso por ofrecer a nuestros lectores voces que no sólo conocen el estado, sino que lo sienten, lo entienden y se atreven a pensarlo más allá del discurso de moda. Bienvenido, Julián Ricalde Magaña. Esta tribuna es tuya. Y la conversación apenas comienza.