Redacción / Quintana Roo Ahora
Playa del Carmen, QR.— Luego de que la Fiscalía General del Estado informara sobre la detención de Irvin Alexander, se destacó la rápida actuación de la Policía Municipal de Playa del Carmen para lograr su ubicación y aseguramiento. Tras su captura, el sujeto presuntamente habría proporcionado información que condujo a la localización de otras cinco personas —tres mujeres y dos hombres— vinculadas con el homicidio de una mujer y su hijo.
La Fiscalía confirmó que las seis personas fueron aseguradas y puestas a disposición del Ministerio Público como parte de la carpeta de investigación correspondiente. No obstante, al vencerse el plazo constitucional para la integración del caso, los detenidos deberán ser ingresados a un centro penitenciario.
Debido a que los hechos ocurrieron en Playa del Carmen, el procedimiento habitual indicaría su traslado al penal de ese municipio. Sin embargo, esta opción representa un posible riesgo de seguridad, ya que en ese mismo centro se encuentra recluido Samuel Esteban, señalado como uno de los líderes de la célula criminal conocida como Los Compich, con presencia en Tulum. Cabe señalar que dicho individuo esperaba la visita de su esposa e hijo el día del crimen y se enteró de su asesinato cuando ocurrió el ataque en las inmediaciones del penal, situación que podría detonar conflictos internos.
Ante este escenario, no se descarta que las autoridades opten por trasladar a los detenidos a otros centros penitenciarios, como los ubicados en Cozumel o Chetumal, con el objetivo de prevenir confrontaciones.
En el caso de las mujeres detenidas, de acreditarse su participación en los hechos, serían enviadas a penales de Cancún o Chetumal, debido a que los centros de reclusión de Playa del Carmen y Cozumel no cuentan con áreas para población femenil.
De acuerdo con las primeras líneas de investigación, el ataque estaría relacionado con la disputa territorial entre grupos dedicados al narcomenudeo que operan en Tulum. Las autoridades también confirmaron el aseguramiento del vehículo utilizado por los agresores para intentar escapar, así como del arma que presuntamente fue empleada en la ejecución.