A pesar de que la seguridad se vio rebasada en un primer momento, las vallas metálicas instaladas en el interior impidieron tanto el acceso de los inconformes como la interrupción de la conferencia
La situación en Puerto Príncipe sigue siendo fluida y preocupante, con un llamado urgente a la estabilidad y al restablecimiento del orden por parte de la comunidad internacional.