Los reyes de Suecia, Carlos XVI Gustavo y Silvia, han vuelto a contemplar la majestuosa pirámide del Adivino en la zona arqueológica de Uxmal, durante su segunda visita a Yucatán después de 42 años.
En esta ocasión, los monarcas suecos optaron por escuchar los discursos de bienvenida en lengua maya, yaqui y español, traducidos al inglés por personal de la embajada sueca, en lugar de dirigir un mensaje directo a los representantes de las etnias maya y yaqui, así como a la sociedad yucateca representada por el gobernador Mauricio Vila Dosal.
El discurso oficial en nombre de los reyes y del gobierno de Suecia fue pronunciado por el ministro de Cooperación Internacional para el Desarrollo de Suecia, Johan Forssell. En su intervención, Forssell agradeció la cálida bienvenida ofrecida por el h’men Édgar Peraza Chan, el gobernador tradicional del pueblo yaqui Joaquín Cota Buitimea, y el gobernador Mauricio Vila.
Durante la visita, la reina Silvia lució un vestido colorido adornado con figuras de aves autóctonas de Yucatán, combinado con zapatos Chanel bajos en tonos café con beige. Para la fotografía oficial, la reina se quitó sus lentes oscuros, aunque mantuvo en todo momento un rebozo verde obsequiado por la poeta María Casanova Ferráez al finalizar su declamación. Además, portó un sombrero café entregado por el personal del Gobierno del Estado, quienes también distribuyeron esta artesanía entre las mujeres de la comitiva europea.
La visita de los reyes de Suecia a la Zona Arqueológica de Uxmal no solo resalta la importancia histórica y cultural de este sitio, sino que también fortalece los lazos entre Suecia y México, en un gesto de aprecio por la riqueza cultural y la hospitalidad del pueblo yucateco.
