Redacción / Quintana Roo Ahora
FRANCIA.- Después de 28 años de ausencia, el equipo mexicano de natación artística ha vuelto a los Juegos Olímpicos, haciendo su aparición en París 2024. Desde su última participación en Atlanta 1996, muchas generaciones han pasado, pero esta última ha demostrado una característica que las distingue: la resiliencia.
Gracias a su determinación y esfuerzo, las mexicanas lograron clasificarse a los Juegos Olímpicos y sorprendieron al mundo con su desempeño. La rutina acrobática, que fue su mayor fortaleza, les valió una calificación de 263.4567, dejando una marca impresionante en su participación en conjunto.
La coreografía, con un grado de dificultad de 26.950, combinó música prehispánica con electrónica, creando una conexión especial con el público. Los trajes en rosa mexicano destacaron entre la multitud, capturando la atención global y subrayando la cantidad de acrobacias que el equipo realizó con destreza.
En su presentación previa, el equipo obtuvo 347.3874 puntos en la rutina libre. Sin embargo, un error en la rutina técnica les costó recibir una calificación de 242.9491, resultando en una puntuación final de 853.7931, ubicándolas en la séptima posición.
El podio olímpico fue dominado por China, que se llevó el oro con 996.1389 puntos, seguida por Estados Unidos con la plata al sumar 914.3421, y España que obtuvo el bronce con 900.7319 unidades.
México ha demostrado que, con dedicación y resiliencia, es posible romper barreras y destacar en el escenario internacional.
