Redacción / Quintana Roo Ahora
CANCÚN.- La presidenta municipal de Cancún, Ana Paty Peralta, sorprendió esta mañana con un anuncio que ha dejado boquiabiertos a propios y extraños: la eliminación total de los baches en la ciudad será una realidad en 2024 gracias a una inversión sin precedentes y un material innovador importado desde Europa.
En una rueda de prensa celebrada en el Palacio Municipal, la edil aseguró que el proyecto “Cancún sin Baches” contará con un presupuesto extraordinario de 500 millones de pesos, el cual se destinará exclusivamente a la compra y aplicación de un pavimento de “autorreparación”, desarrollado en los laboratorios más avanzados de Alemania y Suiza.
“El material que hemos adquirido tiene la capacidad de regenerarse ante cualquier fisura gracias a microcápsulas de polímeros reactivos. Nunca más habrá baches en Cancún. Es una inversión a futuro que garantizará calles en perfectas condiciones durante los próximos 50 años”, afirmó Peralta mientras sostenía una muestra del supuesto material en sus manos.
La eliminación de baches: prioridad internacional
La presidenta municipal enfatizó que Cancún será la primera ciudad en América Latina en implementar esta tecnología, poniéndose a la vanguardia en infraestructura urbana. Según el equipo técnico del Ayuntamiento, los trabajos comenzarán el 1 de enero y, si todo sale según lo planeado, los más de 20 mil baches detectados en la ciudad desaparecerán antes de Semana Santa.
Vecinos de regiones como la 95, la 101 y Villas Otoch Paraíso se mostraron emocionados, aunque también un tanto incrédulos ante el anuncio. “Ojalá ahora sí nos cumplan, porque ya estamos hartos de tener que reparar el coche cada mes por culpa de los baches”, comentó don José, un taxista que lleva más de 15 años recorriendo las calles del destino turístico.
Y por último: Recuerda, inocente palomita, que te dejaste engañar, en este día en que nadie debes confiar.
Así es, amigos lectores, esta revolucionaria tecnología tendrá que esperar, pues la promesa de “Cancún sin baches” no fue más que una broma por el Día de los Inocentes. Mientras tanto, seguiremos esquivando baches y rezando para que al menos los más grandes encuentren pronta solución. ¡Feliz 28 de diciembre!
