Redacción / Quintana Roo Ahora
Pachuca.— Lo que comenzó como una velada de fiesta terminó convertido en terreno fértil para rumores cuando Alfredo Olivas interrumpió de manera repentina su presentación en el Palenque de Pachuca, luego de recibir un misterioso obsequio sobre el escenario. La pausa, el corte de luces y la detención de la banda bastaron para encender especulaciones en el público y en redes sociales, donde muchos temieron una posible amenaza contra el cantante de regional mexicano.
El episodio ocurrió mientras Olivas interpretaba el tema “Volverá” ante un recinto lleno. Un hombre se acercó al músico, le entregó un objeto y tras un breve intercambio con su staff, el cantante hizo una seña y salió del escenario. En las gradas, la inquietud era palpable; en TikTok y Facebook comenzaron a circular frases como: “Ojalá no haya sido una amenaza”.
Sin embargo, versiones difundidas posteriormente por el medio local Pachuca Brilla desmintieron cualquier indicio de agresión. Según su reporte, el hombre era integrante de la banda de Juan Pedro Cruz y cumplía una promesa familiar: entregar a Alfredo Olivas una prenda original que perteneció a Juan Gabriel, el “Divo de Juárez”.
Asistentes al evento relataron que el objeto era una chamarra del ícono juarense, gesto que habría conmovido al intérprete de “El vals del olvido”, quien decidió retirarse momentáneamente al camerino para guardar el regalo.
La coincidencia entre la entrega del obsequio y una falla técnica de audio —hecha pública por el propio Olivas durante el espectáculo— disparó el malentendido. Hasta ahora, el cantante no ha emitido un comunicado oficial en sus redes, pero la información disponible apunta a un homenaje emotivo y no a una amenaza, como muchos temieron de inicio.
El incidente revela un clima de hipervigilancia entre el público del regional mexicano, donde cualquier interrupción no planificada puede prender las alarmas antes de conocer el fondo real de los hechos.
