
Redacción / Quintana Roo Ahora
Cancún.- Postrado en una cama con una grave infección en el pie a causa de una herida que no sana debido a la diabetes, y viviendo en completa oscuridad, sin luz ni agua, en una humilde casa de madera y cartón, así sobrevive día a día Don Lucio Chulin, un adulto mayor de 76 años, abandonado por sus propios hijos.
Vecinos de la colonia Cuna Maya, en la región 203, relatan con tristeza que desde ayer Don Lucio se ha negado a recibir alimentos o bebidas. Se encuentra sumido en la tristeza, pues diariamente suplica que localicen a sus hijos, aferrado a la esperanza de volver a verlos y compartir un momento con ellos.
Don Lucio pasa sus días en una cama cubierta apenas por un pabellón, rodeado de miseria, sin piso, sin energía eléctrica y sin agua potable. Aunque insiste en que lo ayuden a contactar a sus hijos, estos nunca han respondido a su llamado.
Una vecina, conmovida por la situación, logró localizar a uno de sus hijos, pero la respuesta fue desoladora: el hombre dijo estar ocupado trabajando y se deslindó por completo de la responsabilidad de cuidar a su padre. La vecina, por compasión, decidió no contarle la respuesta a Don Lucio, temiendo que su tristeza empeorara su ya delicado estado de salud.
Con la intención de ayudar, los vecinos compartieron una fotografía del abuelito en redes sociales, solicitando el apoyo de la comunidad. Esta noche, paramédicos de una empresa privada lo trasladaron al hospital general para recibir atención médica. Hasta el momento, ninguno de sus hijos ha acudido a verlo.