Redacción / Quintana Roo Ahora
CANCÚN.- La construcción del Puente Vehicular Nichupté, uno de los proyectos de infraestructura más ambiciosos para la movilidad en Cancún, alcanzó un hito importante esta semana con el inicio de la instalación de un tramo metálico tipo arco sobre la laguna Nichupté. Este avance refuerza el compromiso de las autoridades con la modernización vial del destino turístico.
De acuerdo con la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), este tramo del puente tiene una longitud de 103 metros, un peso de 593.6 toneladas y una estructura diseñada para sortear los retos del terreno kárstico característico de la región. La base del arco está sostenida por zapatas que evitan una caverna natural de 67 metros de diámetro y más de 200 metros de profundidad, garantizando la estabilidad y seguridad de la obra.
Con una extensión total de 8.8 kilómetros, el puente vehicular Nichupté conectará dos de las principales arterias de Cancún: el Bulevar Luis Donaldo Colosio y el Bulevar Kukulkán, facilitando el acceso a la zona hotelera y reduciendo significativamente los tiempos de traslado para residentes y turistas. Además, el proyecto contempla la construcción de dos entronques principales, mejorando la conectividad y optimizando el flujo vehicular.
Sin embargo, aunque la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, había anunciado que la obra estaría concluida a mediados de este año, el proyecto todavía no ha llegado a su etapa final. La Agencia de Proyectos Estratégicos del Estado de Quintana Roo (AGEPRO) supervisa de manera constante el progreso de los trabajos, subrayando la importancia de esta infraestructura para resolver el creciente problema de tráfico en la ciudad.
La expectativa es que, una vez terminado, el Puente Nichupté no solo mejorará la movilidad de Cancún, sino que también ofrecerá una experiencia más eficiente y segura para quienes transitan entre el aeropuerto, el centro de la ciudad y la zona hotelera. Esta obra se perfila como una solución estratégica que marcará un antes y un después en la conectividad vial del principal destino turístico de México.
Mientras tanto, los cancunenses y visitantes esperan con ansias la finalización de este puente que promete convertirse en un ícono de la infraestructura moderna en el Caribe mexicano.